martes, 23 de febrero de 2016
SEMANA DEL 22 AL 26 DE FEBRERO
https://drive.google.com/file/d/0BzgkST4YTpV_eXJpWmhsS01MM2M/view?usp=sharing
domingo, 14 de febrero de 2016
domingo, 7 de febrero de 2016
SEMANA DEL 11 AL 13 DE FEBRERO DE 2016
INSTITUTO
CIENTÍFICO MOTOLINIA, A.C.
“Ardens et Lucens”
PREESCOLAR
– PRIMARIA – SECUNDARIA – PREPARATORIA
30PJN0574S – 30PPR1149 U – 30PESO136C –
30PBH0310Q
REGLAMENTO
INTERNO
ETIMOLOGIAS GRECOLATINAS
Para lograr un ambiente de armonía, de respeto, tolerancia, compañerismo
dentro del salón, los alumnos seguirán al pie de la letra las siguientes
normas:
1. Expresarse de forma respetuosa y adecuada hacia sus compañeros, maestra, prefectas, y con toda
la comunidad educativa.
2. Evitar comentarios ofensivos o fuera de
lugar, groserías, sobrenombres, etc.
3. Abstenerse de
tomar sin autorización los materiales escolares de sus compañeros
4. Evitar
aquellas acciones que puedan molestar y/o dañar de forma consciente a cualquier
integrante de la comunidad educativa.
5. Llegar
puntual a la clase. El alumno que llegue después de que haya entrado la maestra,
podrá entrar, pero con falta, y, por lo tanto, no se firmarán las actividades
de la clase.
6. Estar atento a la explicación de la clase y a
la participación de compañeros. Al alumno que no esté atento e interrumpa la
clase, no se le firmarán las actividades correspondientes, y afectará también
en el rasgo de actitudes y valores.
7. Mantener limpio y ordenado su lugar.
8. No realizar tareas de otra materia.
9. Entregar
trabajos y tareas en tiempo y forma. No se firmarán, en su totalidad, si están
incompletos, sucios, poco presentables, en desorden, en hojas arrugadas, con
mala ortografía, caligrafía imperfecta, o bien, que no se entienda lo que se
quiere expresar; es decir, para tener las firmas completas deberán estar con
excelente presentación.
10. Durante las
clases y en revisiones, los apuntes
deberán estar ordenados y limpios, de lo contrario, la maestra se reservará el
derecho a firmar actividades.
11. Si faltas por
alguna razón, tienes la responsabilidad de pedir el material que se haya
utilizado y acordar con la maestra el tiempo de revisión, siempre y cuando tu
falta esté plenamente justificada por dirección.
12. No se firmarán
actividades a destiempo.
13. Si el alumno
no trabaja en clase, se bajarán décimas en el rasgo de actitudes y valores y, por
consiguiente, no se firmarán actividades correspondientes a dicha clase.
14. Recuerda pedir
las cosas de la mejor manera, en un tono adecuado y respetuoso; en la manera de
pedir está el dar.
15. El alumno que
incurra en faltas de respeto y atención será canalizado a la dirección,
obteniendo también una sanción en esta materia, la cual consistirá en un
reporte.
16. Cada reporte tendrá un valor de 0.5 décimas
menos a tu calificación y pueden ser
acumulativos.
17. Todas
las tareas serán escritas a mano, en tu libreta de apuntes, salvo indicación
contraria por parte de la maestra.
18.- Los trabajos en equipo sólo podrán
ser realizados en el salón bajo la supervisión del docente; si se realiza fuera
de este lugar no tendrá el valor asignado.
19. En el salón y en la biblioteca, sólo se podrá utilizar computadora portátil o tabletas para la elaboración de trabajos de investigación, proyectos, etc.; en caso de no llevarlas, se perderá la firma de ese día.
19. En el salón y en la biblioteca, sólo se podrá utilizar computadora portátil o tabletas para la elaboración de trabajos de investigación, proyectos, etc.; en caso de no llevarlas, se perderá la firma de ese día.
20. Cada alumno será responsable de cuidar y de
presentar su material didáctico (libros y libretas), sus cuadros de
firmas y su carpeta de evidencias cuando sea solicitado por la maestra.
El ambiente de una
clase lo hacen el maestro y los alumnos, espero tu colaboración y tu
disposición, así como tus sugerencias y comentarios para mejorarla; por mi
parte trataré de explicar de una manera clara los temas de este curso.
Recuerda siempre,
que tú te ganas tu calificación, con tus actitudes, tu educación, y siendo
honesto (a) contigo mismo (a). Y por supuesto, estudiando continuamente, siendo
perseverante con tus propósitos y tu proyecto de vida.
Xalapa, Ver.,
febrero del 2016
Firma del alumno
|
Firma del padre o tutor
|
Firma del maestro
|
MATERIAL DIDÁCTICO:
1. Libreta
2. Diccionario
3.
TAREA PARA LA SEGUNDA SESIÓN:
1. Recuerda llevar imágenes o láminas de Grecia y Roma
2. Imprime los siguientes mitos:
El lenguaje
El
Padre Primero de los guaraníes se irguió en la oscuridad, iluminado por los
reflejos de su propio corazón, y creó las llamas y la tenue neblina. Creó el
amor, y no tenía a quién dárselo. Creó el lenguaje, pero no había quién lo
escuchara.
Entonces
encomendó a las divinidades que construyeran el mundo y que se hicieran cargo
del fuego, la niebla, la lluvia y el viento. Y les entregó la música y las
palabras del himno sagrado, para que dieran vida a las mujeres y a los hombres.
Así
el amor se hizo comunión, el lenguaje cobró vida y el Padre Primero redimió su
soledad. Él acompaña a los hombres y las mujeres que caminan y cantan:
Ya
estamos pisando esta tierra,
ya
estamos pisando esta tierra reluciente.
Los
abuelos (Fragmento)
Entonces los dioses se juntaron
otra vez y trataron acerca de la creación de nuevas gentes, las cuales serían
de carne, hueso e inteligencia. Se dieron prisa para hacer esto porque todo
debía estar concluido antes de que amaneciera. Por esta razón, cuando vieron
que en el horizonte empezaron a notarse vagas y tenues luces, dijeron:
— Ésta es la hora propicia para
bendecir la comida de los seres que pronto poblarán estas region Y así lo
hicieron. Bendijeron la comida que estaba regada en el regazo de aquellos
parajes. Después dijeron oraciones cuya reso¬nancia fue esparciéndose sobre la
faz de lo creado como ráfaga de alhucema que llenó de buenos aromas el aire. No
hubo ser vi¬sible que no recibiera su influjo. Este sentimiento fue como par¬te
del origen de la carne del hombre. A tiempo que sucedía esto faltaba poco para
que el sol, la luna y las estrellas aparecieran en el cielo. De lugares
ocultos, cuyos nombres se dicen en las cróni¬cas, bajaron, hasta los sitios
propicios, el Gato, la Zorra, el Loro, la Cotorra y el Cuervo. Estos animales
trajeron la noticia de que las mazorcas de maíz amarillo, morado y blanco,
estaban crecidas y maduras. Por estos mismos animales fue descubierta el agua
que sería metida en las hebras de la carne de los nuevos seres. Pero los dioses
la metieron primero en los granos de aquellas mazor¬cas. Cuando todo lo que se
dice fue revelado, fueron desgranadas las mazorcas y con los granos sueltos,
desleídos en agua de lluvia serenada, hicieron las bebidas necesarias para la
creación y para la prolongación de la vida de los nuevos seres. Entonces los
dioses labraron la naturaleza de dichos seres. Con la masa amarilla y la masa
blanca formaron y moldearon la carne del tronco, de los brazos y de las
piernas. Para darles reciedumbre les pusieron carrizos por dentro. Cuatro
gentes de razón no más fueron primeramente creadas así. Luego que estuvieron
hechos los cuerpos y quedaron completos y torneados sus miembros y dieron
muestras de tener movimientos apropiados, se les requirió para que pensaran,
ha¬blaran, vieran, sintieran, caminaran y palparan lo que existía y se agitaba
cerca de ellos. Pronto mostraron la inteligencia de que estaban dotados,
porque, en efecto, como cosa natural que salió de sus espíritus, entendieron y
supieron cuál era la realidad que los rodeaba. Conocieron también lo que había
debajo del cielo, lo que se erguía encima de la tierra y lo que temblaba dentro
del es¬pacio oculto y poblado por el viento. Aunque todavía la superficie de la
tierra estaba sumida en tinieblas, tuvieron poder para mirar lo que no había
nacido ni era revelado. Dieron señales de que po¬seían sabiduría la cual con
sólo querer, la comunicaron al cogollo de las plantas, al tronco de los
árboles, a la entraña de las piedras y a la hoguera enterrada en la oquedad de
las montañas. Estos se¬res fueron Balam Quitzé, Balam Acab, Mahucutah e Iquí
Balám.
Cuando los dioses presenciaron el
nacimiento de estos seres, lla¬maron al primero y le dijeron:
— Habla y dinos por ti y por los
demás que te acompañan: ¿qué ideas tienes de los sentimientos que te animan?
¿Es bueno y airo¬so tu modo de andar? ¿Ejercitas con gracia tu mirada? ¿Es
justo y claro el lenguaje que usas? ¿En toda ocasión lo recuerdas bien?
¿Entiendes lo que así se dice y se sugiere? Si todo lo que haces es cabal, te
será dable ver lo que está depositado en las cosas con fuerza de
fructificación. Si es así, debes ir a recogerlo y a poseerlo. Haz que tus
hermanos procedan de igual manera que tú. Si no es así, permanece quieto en tu
sitio; de ahí no te muevas y procura que tus hermanos sigan tu ejemplo. Todos
deben tener medida de su poder.
Al oír estas palabras, los nuevos
seres vieron que eran cabales sus sentidos y quisieron mostrar su
agradecimiento. Para mostrarlo, Balam Quitzé habló, a nombre de los demás, de
esta manera:
— Nos habéis dado la existencia;
por ella sabemos lo que sabe¬mos y somos lo que somos; por ella hablamos y
caminamos y co¬nocemos lo que está en nosotros y fuera de nosotros. Es de esta
manera cómo podemos entender lo grande y lo pequeño y aun lo que no existe o no
está revelado delante de nuestros ojos. Así percibimos ya dónde descansan y se
apoyan las cuatro esquinas del mundo, las cuales marcan los límites de lo que
nos rodea por abajo y por arriba.
Pero ha de saberse que los dioses
no vieron con agrado las consideraciones que de su propio saber hicieron, con
tanta franqueza, los nuevos seres. Por eso los dioses conversaron entre sí:
— Ellos comprenden -dijeron- lo
que es grande y lo que es peque–o y saben la causa de esta diferencia.
Pensemos en las conse¬cuencias que puede tener este hecho en el ejercicio de la
vida. La energía de esta lucidez ha de ser nociva. ¿Qué haremos para re¬mediar
el peligro que se desprenderá de tan evidente actividad? Meditémoslo. Hagamos
que los nuevos seres conozcan una parte de la tierra que les rodea. Sólo algo
de lo que existe les será re¬velado. No lo conocerán todo, porque no sabrían
comprender su sentido ni menos usarlo con provecho. Se engañarían con el
se¬creto que tiene el orden del caos. Es preciso limitar sus facultades. Así
disminuirá su orgullo. Los desmanes que cometan serán de menos alcance. Si los
abandonamos y llegan a tener hijos, éstos, sin duda, percibirán más que sus
abuelos y habrá un momento en que entiendan lo mismo que los propios dioses.
Por esto es pre¬ciso reformar sus deseos y sus sueños, para que no se aturdan
ni envanezcan cuando se abra en el horizonte la claridad del día que ya viene.
Si no se hace esto pretenderán, en su locura y desvío, ser tanto o más que
nosotros mismos. Estamos a tiempo para evitar este peligro, que será fatal para
el orden fecundo de la creación.
A fin de que estas
gentes no estuvieran solas, los dioses crearon otras de sexo femenino. Las
formaron como se cuenta en seguida. Durmieron a los machos y mientras dormían
crearon a las hembras. Junto a ellos las pusieron desnudas y quietas, como si
fueran muñecos de madera pulida. Cuando los machos despertaron, las vieron con
regocijo, porque, en efecto, eran hermosas. Al mirarlas tan esbeltas, de piel
tan lustrosa y tersa y de tan plácido aroma, se sintieron llenos de alegría y
de complacencia y las tomaron por compañeras. Luego, para distinguirlas, les
pusieron nombres apropiados, los cuales eran de mucho encanto. Cada nombre
evocaba la imagen de la lluvia según las estaciones. Una vez que estas parejas
se vieron con regalo y se conocieron en la intimidad de sus cuerpos,
engendraron nuevos seres con quienes se empezó a poblar la Tierra. Muchos de
estos seres nacidos fueron, con el tiempo, grandes y diestros; y poseyeron
artes difíciles, no reveladas nunca a los vulgares. Por esta razón los dioses,
desde las tinieblas, los escogieron para ser Adoradores y Sacrificadores,
que son oficio de dignidad que no a todos cuadra ni conviene. Las primeras
gentes engendradas tuvieron la misma belleza de sus madres y el mismo poder de
sus padres, y supieron adivinar el misterio de su origen.
De esta suerte Balam
Quitzé y los otros abuelos resultaron ser el principio de las gentes que luego
vivieron y se desarrollaron durante las peregrinaciones y el asiento de las
tribus del quiché. No se olviden los nombres que se dicen a fin de poder
conocer la estirpe de los que luego nacieron. Estos seres primitivos se propagaron
por la tierra que está en la región del Oriente.
El hombre y la mujer en el Edén
Cuando el Señor Dios
hizo la tierra y los cielos, no crecían en ella plantas salvajes ni grano
porque el Señor Dios aún no había envia¬do lluvia para regar la tierra, ni
había personas que la cultivaran. En cambio, del suelo brotaban manantiales que
regaban toda la tierra. Luego el Señor Dios formó al hombre del polvo de la
tierra. Sopló aliento de vida en la nariz del hombre, y el hombre se con¬virtió
en un ser viviente.
Después el Señor Dios
plantó un huerto en Edén, en el oriente, y allí puso al hombre que había
formado. El Señor Dios hizo que crecieran del suelo toda clase de árboles:
árboles hermosos y que daban frutos deliciosos. en medio del huerto puso el
árbol de la vida y el árbol del conocimiento del bien y del mal.
Un río salía de la
tierra del Edén que regaba el huerto y después se dividía en cuatro ramales. El
primero, llamado Pisón, rodeaba toda la tierra de Havila, donde hay oro. El oro
de esa tierra es ex¬cepcionalmente puro; también se encuentran allí resinas
aromá¬ticas y piedras de ónice. El segundo, llamado Gihón, rodeaba toda la
tierra de Cus. El tercero, llamado Tigris, corría al oriente de la tierra de
Asiria. El cuarto se llama Éufrates.
El Señor Dios puso al
hombre en el jardín de Edén para que se ocu¬para de él y lo custodiara; pero el
Señor Dios le advirtió: “Puedes comer libremente del fruto de cualquier árbol
del huerto, excepto del árbol del conocimiento del bien y del mal. Si comes de
su fru¬to, sin duda morirás”.
Después, el Señor
Dios dijo: “No es bueno que el hombre esté solo. Haré una ayuda ideal para él”.
Entonces el Señor Dios formó de la tierra todos los animales salvajes y todas
las aves del cielo. Los puso frente al hombre para ver cómo los llamaría, y el
hombre escogió un nombre para cada uno de ellos. Puso nombre a todos los
animales domésticos, a todas las aves del cielo y a todos los animales
salvajes; pero aún no había una ayuda ideal para él. Entonces el Señor Dios
hizo que el hombre cayera en un profundo sueño. Mientras el hombre dormía, el
Señor Dios le sacó una de sus costillas y cerró la abertura. Entonces el Señor
Dios hizo de la costilla a una mujer, y la presentó al hombre.
—”¡Al fin! -exclamó el hombre—
¡Ésta es hueso de mis huesos
y carne de mi carne!
Ella será llamada mujer (ishá)
porque fue tomada del hombre (ish).
Esto explica por qué el hombre deja a su padre y a su
madre, y se une a su esposa y los dos se convierten en uno solo.
3. Lectura de un fragmento de "El crátilo o del lenguaje" de Platón.
4. Buscar el significado de su nombre y el blasón de sus apellidos (harán el escudo en el salón)5. Investigar distintas definiciones de etimologías:
a) Ferdinand de Saussure
b) Agustín Mateos Muñoz
c) Real Academia Española
d) Otro.
¡GRACIAS!
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